"Rellenamos el cráter de las bombas... y de nuevo sembramos... y de nuevo cantamos... porque la vida jamás se declara vencida" (poema anónimo vietnamita)
domingo, 28 de abril de 2013
sabiduría de tierra...
Etiquetas:
Alfon Cobo,
El cordobés impasible,
riqueza,
sonrisa,
Tan Son,
Vietnam
lunes, 22 de abril de 2013
las dentelladas del lobo...

Fuente: Aula25
viernes, 19 de abril de 2013
construir algo alegre…
Los globos de colores lo inundan
todo. Y aún así Adelina Granados, 57 años, salvadoreña que se interpreta a sí
misma, no deja de inflar más y más. Sobre el escenario cinco
mujeres, tres octogenarias, todas refugiadas que huyeron de la guerra, la
represión o la muerte, entretejen sus recuerdos: un suelo que durante un tiempo
fue la única cama, los preparativos de una boda, mensajes
clandestinos escondidos en los zapatos, los ausentes, la comida, los amores… “A
veces se me confunden las historias del pasado y las del presente, he llegado a
pensar que algunas de esas historias nunca sucedieron pero me dicen que no me
preocupe, que en el teatro a veces se cuentan verdades y a veces mentiras, que
lo importante es contarlas”, dice sobre el escenario la hondureña Dilia
Ramírez, de 78 años, una mujer pequeña y delgada de ojos vivarachos que sobre
las tablas ultima los preparativos de la boda de su hija hasta que su compañera
espeta: ”María Dilia, miente. En realidad ella se enteró de que su hija se
había casado a través de una carta”. Todo
está aquí es mucho más que una obra de teatro, es el último proyecto del
colectivo Memoria migrante, una forma
de “dar voz a los sin voz, de reconstruir la historia oral de personas y
comunidades mediante el arte, de crear algo a través de experiencias
individuales y ahora es un intento por reconstruir el proceso migratorio”,
explica su directora, Melina Alzogaray… [quien] se cruzó con “las mujeres monarcas”, un
grupo de refugiadas políticas latinoamericanas, mujeres comprometidas que
coincidieron en la Casa del Refugiado A.C de la capital mexicana hace años, y
comenzó a fraguarse la idea. “Queríamos crear espacios de reflexión, ofrecer
una salida laboral a esas mujeres cuando muchas ya han entrado en la
tercera edad y parece que no pueden hacer nada, construir algo alegre”. Fue un
proceso de creación colectivo que al principio las generó incredulidad pero que
funcionó gracias a la increíble entrega y profesionalidad de estas mujeres”.
Todo comenzó cosiendo muñecas. “Fue muy bonito, comenzamos a hablar, a recordar
mientras las hacíamos, nosotras nos conocíamos de antes pero salieron muchas
cosas nuevas”, explica Dilia. “Yo inflé 99 globos rojos y 103 azules”, comenta
Adelina. “Y 263 globos eran amarillos”, detalla. “También inflé 608 globos
verdes”, insiste Adelina. “509 rojos y 5 negros”, continúa. Con todos estos
recuerdos y horas de ejercicios y ensayos, se configuró una obra que está
recorriendo México, ofrece un salario a sus actrices y trabajadores gracias al
apoyo de diversas instituciones, y su directora confía en que pueda llegar a
otros países. “Ha empoderado a mujeres luchadoras” dice orgullosa Alzogaray,
aunque reconoce que durante todo el proceso se vivieron momentos duros. Ha sido
una catarsis”, subraya Dilia. Antes de salir a escena, calientan la voz, el
cuerpo, gritan, se abrazan, pierden el pudor, se gustan a sí mismas. Sobre el
escenario comparten impresiones como refugiadas en un país por el que hoy,
cientos de migrantes como ellas transitan en busca de una vida mejor. “Es muy
importante recordar todo aquello en el México de ahora”, dice Eva. Después de
una hora de espectáculo, comienzan los aplausos. A pocos metros, Adelina
sentencia: “Hace 25 años me operaron y de ejercicio me pusieron inflar globos.
No me acuerdo de nada más… o tal vez de un poco sí”.
jueves, 18 de abril de 2013
la necesidad de plural…
Hace apenas dos años
que nos juntamos
para hacer algo
aunque fuera bien poco
por la patria doméstica
la pobrecita jodida
para hacer algo
aunque fuera bien poco
por la patria doméstica
la pobrecita jodida
hace dos años que
empezó a ser lindo
juntarnos de a muchos para saber qué pocos éramos
y admitir por unanimidad el desorden del mundo y de la vida
jurar sobre la biblia o mejor sobre el reglamento provisorio
que nunca intentaríamos ordenar del todo vida y mundo
simplemente íbamos a procurar que el caos se dejara organizar
de a poco
juntarnos de a muchos para saber qué pocos éramos
y admitir por unanimidad el desorden del mundo y de la vida
jurar sobre la biblia o mejor sobre el reglamento provisorio
que nunca intentaríamos ordenar del todo vida y mundo
simplemente íbamos a procurar que el caos se dejara organizar
de a poco
y que el hombre mereciera sus castigos pero también sus
recompensas
recompensas
y sobre todo que no recibiera recompensas o castigos a los que
nunca se había hecho acreedor
nunca se había hecho acreedor
de pronto empezaron a morir nuestros hermanos y nuestras
hermanas
y al primer vómito de angustia advertimos que no estábamos
preparados para que nos estafaran así nomás la vida
la muerte dejó de ser un niño vietnamita quemado con
napalm y cocacola en alguna zona desmilitarizada para ser un invierno aquí una bomba aquí un dolor aquí un
fusilamiento por la espalda una tristeza inmóvil
apenas visible entre el humo de doscientos cigarrillos
preparados para que nos estafaran así nomás la vida
la muerte dejó de ser un niño vietnamita quemado con
napalm y cocacola en alguna zona desmilitarizada para ser un invierno aquí una bomba aquí un dolor aquí un
fusilamiento por la espalda una tristeza inmóvil
apenas visible entre el humo de doscientos cigarrillos
con cien mil nudos en
cien mil gargantas
una tarde cualquiera empezamos a llevar amistades y amores
a la teja al del norte al buceo
al santo camposanto del no olvido
y se acabaron todas las variantes de la joda
hubo que pensar milímetro a milímetro el vasto territorio del
deber
una tarde cualquiera empezamos a llevar amistades y amores
a la teja al del norte al buceo
al santo camposanto del no olvido
y se acabaron todas las variantes de la joda
hubo que pensar milímetro a milímetro el vasto territorio del
deber
está visto que un pueblo sólo empieza a ser pueblo cuando
cada singular necesita perentoriamente su plural
y fue precisamente la necesidad de plural la que nos llevó a
encontrarnos y vernos las caras y vernos los miedos
y vernos la osadía
cada singular necesita perentoriamente su plural
y fue precisamente la necesidad de plural la que nos llevó a
encontrarnos y vernos las caras y vernos los miedos
y vernos la osadía
Imagen: hostelbookers
miércoles, 10 de abril de 2013
pájaro de barro…
Hice un pájaro de
barro
y lo pinté de colores:
pico amarillo y blanco
alas azules y ocres.
y lo pinté de colores:
pico amarillo y blanco
alas azules y ocres.
Antes de dormir le cuento
a mi pájaro de barro
un cuento de vuelo y viento
para que empiece su canto.
Sé que vuela, que vuela
y que cuida mis sueños,
sale por la ventana
y vuelve luego.
Un arco iris de lluvia
para que beba mi pájaro,
granos de trigo y oro
para que alegre su canto.
Tengo un pájaro de barro
lo modelé con mis manos
y le enseño las palabras
de un idioma inventado.
Fuente: aula25
martes, 9 de abril de 2013
en los espacios comunes…

Imagen: medioambientales
lunes, 1 de abril de 2013
somos lo que estamos soñando…

Desde el Quirquincho, marzo de 2013
Fuente: Universidad Trashumante
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